domingo, 24 de febrero de 2013

Segunda semana de curso

Esta semana, aunque con un poco de mal tiempo, hemos podido disfrutar de unos talleres muy interesantes.

El jueves 21 vinieron nuestros compañeros de A'Chordiga (Huesca) a dar el taller de semillas y biodiversidad. Explicaron desde qué es una semilla hasta la gran importancia de cultivar variedades locales para conservar la biodiversidad, repasando los falsos mitos sobre estos temas. Nos hicieron una pequeña prueba en la que teníamos que reconocer y clasificar por familias algunas de las semillas que trajeron. Y aprovechando que estaban distribuidas por familias pasaron a contarnos la polinización de estas plantas y su extracción de las semillas.


El sábado 23 volvimos a realizar tres talleres, pero esta vez, para hacer los grupos nos tuvimos que convertir en sardinas y enlatarnos bien prieticas. 


En el taller de cultivos de invierno tuvimos que buscar dónde estaban e identificarlos para ponerles el cartel con su nombre, además de rellenar unas fichas con sus diferentes características. Una vez rellenadas las pusimos en común para que todas conociéramos los distintos cultivos. Hecho el repaso, pasamos a la práctica y sembramos rabanitos y zanahorias, asociadas éstas con cebollas.


En el taller de tareas de invierno hicimos una recopilación de las tareas típicas de esta estación (tanto de mantenimiento de los cultivos que están en campo, como los dedicados a las futuras plantaciones que vendrán). Después vimos de manera práctica algunas de estas tareas, aplicando algunos preparados, eliminando malas hierbas, atando un cardo o plantando los pequeños frutales que nos darán de merendar de aquí a unas temporadas. ¡Demostrasteis ser muy valientes luchando contra el viento que no nos lo puso nada fácil!


Para el taller de siembra y propagación de cultivos nos refugiamos en un rincón muy especial del huerto y ahí aprovechamos para complementar el taller del jueves, explicar los métodos de siembra y las diferentes formas de multiplicar plantas asexualmente. Hicimos esquejes de romero y semilleros de plantas de flor, aromáticas, lechugas, cebolla, puerro,...


Y para terminar la jornada, disfrutamos de una judiada con verduras riquísima y de un concurso de postres con brownie cheesecake, piña, panacota, fresas con agar, pastel de calabaza y madalenas con chocolate... Madre mía, a cada cual más bueno, en especial la piña a su grado perfecto de maduración, que casi gana! Hicimos votación y ganó la Panacota de Pilar (o de su madre...) por su peculiar movimiento y de premio se llevó una cesta de hortalizas del huerto y huevicos de las gallinas.


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